Páginas

lunes, 22 de noviembre de 2010


La mariposa con las alas de cuero voló sobre un fuego fatuo de odio, y se abrasó... Cayó en el suelo, pero no la pisó nadie. Y abrasada, sonrió al horizonte, dejó atrás un sueño inacabado, y volvió a la rama dónde estaba posada antes de volver a volar.

4 comentarios:

  1. precioso, schi.. francamente emocionante..

    enhorabuena


    otramás.-

    ResponderEliminar
  2. nina me encanta ......esa mariposa siempre volará alto ...y el fuego se apagará incluso antes de volver a comenzar

    ResponderEliminar
  3. las mariposas vuelan siempre a favor del viento, y nosotros solemos hacerlo en contra, no se si por tozudez o bien por que somos asi de tontos.
    Azzo

    ResponderEliminar
  4. y no es lo mismo, Azzo??

    ResponderEliminar